El año que el mundo se vino abajo, de Clare Furniss

A sus dieciséis años, perder a su madre es lo más espantoso que le ha tocado vivir a Pearl, un golpe brutal, inesperado, que sacude los cimientos de su vida. Gentileza de Riverside Agency

Por: Rodrigo Lastreto

Título: El año que el mundo se vino abajo
Autor: Clare Furniss
Editor: Salamandra
Precio: $ 245.00
Tipo de tapa: Rústica c/solapas
Páginas: 256
Dimensiones: 135 x 220 mm
Colección: Blue
Temática: Ficción e historias reales infantiles y juveniles
ISBN: 978-84-1655-501-7
Sinopsis: A sus dieciséis años, perder a su madre es lo más espantoso que le ha tocado vivir a Pearl, un golpe brutal, inesperado, que sacude los cimientos de su vida. El dolor es tan insoportable que no puede evitar canalizarlo hacia su hermana recién nacida, a quien echa la culpa de la tragedia y no podrá perdonar jamás.

Y ahora nadie, ni su padre, ni su abuela, ni su mejor amiga ni desde luego su hermanita conseguirán echar abajo el muro defensivo que ha erigido a su alrededor. Pero ¿y si la madre de Pearl no hubiera desaparecido del todo? ¿Y si siguiera, en cierta forma, presente? El mundo puede dar un vuelco en cualquier momento y, cuando eso ocurre, lo más importante es encontrar algo a lo que aferrarse...

Una novela que no sólo devorarás hasta el final, sino que te sorprenderá por sus pinceladas de fantasía y humor, y que, sobre todo, te emocionará y te dará que pensar.


RESEÑA:

Con las primeras páginas de “El año que el mundo se vino abajo” me emocioné, me enojé y llegué a odiar a su protagonista... Quizá, el término odiar sea un poco exagerado, sobre todo si me refiero a una adolescente que acababa de perder a su mamá. En verdad, lo que me enojó fue su manera de enfrentarse a esta situación. Pero fue su forma de actuar la que me enganchó con la trama, me llevó a internarme en el libro y no poder soltarlo hasta el final.

Para comenzar, podría decir que la historia en sí no es del todo original. Una madre embarazada que muere por un parto que se complica, un bebé que debe luchar por su vida, un padre que tiene que hacerse cargo de la situación y una joven de 16 años que se siente abandonada, sola y se deja atrapar por una depresión espantosa. Pero el diferencial por lo que hay que elegir esta novela, y que la hace altamente recomendable, son sus personajes y su evolución a lo largo de las páginas, de cómo van construyendo la historia y como una muerte inesperada puede llegar a destruir, y al mismo tiempo, unir a una familia. 


«Siempre he pensado que cuando algo terrible va a ocurrir, uno lo adivina de alguna manera. Que esas cosas se presienten, como cuando el aire se carga de humedad antes de la tormenta y uno sabe que más vale ponerse a cubierto hasta que amaine el temporal... Pero resulta que no, que no es así.»

La muerte de la madre de Pearl (la joven protagonista de esta historia) fue el hecho que ocasionó que su mundo se detuviera. ¿Alguna vez tuviste esa sensación? ¿Alguna vez te sentiste estancado en un lugar mientras a tu alrededor todo sigue andando? Eso fue lo que a ella le ocurrió. Allí fue cuando su vida dio un giro de 360 grados y cambió para siempre. Ella tenía a su mamá, a quien amaba a pesar de vivir peleándose ¿Quién no discutió alguna vez con su madre? 

Y de pronto, su rebeldía adolescente chocó contra una pared. Un golpe tan violento que ni el amor de su papá, el apoyo de su mejor amiga ni esa hermanita recién nacida pudieron hacer algo para aplacar tanto dolor. Pearl tenía su mundo, imperfecto por donde se lo mire, pero era feliz. Y cuando algo atentó contra esa felicidad debió encontrar un culpable… Y esa culpable fue su hermana Rose, un bebé recién nacido que además de crecer sin el amor de una madre debía enfrentarse al odio de una hermana que la hacía responsable de la injusta muerte de su mamá.

“El año que el mundo se vino abajo” es un libro que habla de sentimientos profundos y está dividida en los doce meses posteriores a la muerte de la mamá de Pearl. Mientras lees cada capítulo, constantemente pasas del dolor y la tristeza al amor y la comprensión; del humor a la ironía y cuando piensas que todo está perdido, que la vida de Pearl y su familia se hunde en la oscuridad, descubrirás que siempre hay una luz de esperanza al final del túnel. Pero llegar a eso no será fácil, “El mundo puede dar un vuelco en cualquier momento” y hay que estar preparado.

El párrafo final me lo guardo para la autora. Se trata de la primera novela de Clare Furniss, una escritora que acabamos de descubrir y a quien esperamos volver a leer muy pronto… Además, como no querer a Clare quien, entre sus primeros trabajos, se desempeñó en la biblioteca del Shakespeare Centre en Statford-upon-Avon. Con este último detalle nos alcanza para guardarla en un rincón de nuestro corazón.



SOBRE LA AUTORA:

Clare Furniss se crió en Londres y, en la adolescencia, se mudó a Birmingham. Después de trabajar durante una temporada como camarera, dependienta y empleada de la biblioteca del Shakespeare Centre en Stratford-upon-Avon, estudió en las universidades de Cambridge y Aberdeen.

Gestionó temas de comunicación para Shelter, una organización benéfica de apoyo a los sin techo, y más tarde fue la responsable de prensa del ex alcalde de Londres, Ken Livingstone. El año que el mundo se vino abajo es su primera novela. En la actualidad vive en Bath.


OPINIONES DE LA CRÍTICA:
  • «Una voz nueva y poderosa.» The Guardian
  • «Una novela enternecedora que no se arredra ante la intensidad del dolor por la pérdida.» The Sunday Times
  • «Exquisitamente escrita, con un incisivo sentido del humor.» Stylist
  • «Lloré, reí, volví a llorar [...], un libro imprescindible que permanece en el recuerdo mucho después de pasar la última página.» Bliss
  • «Un conmovedor y certero retrato de la adolescencia y de los turbadores efectos de la pérdida y la aflicción.» School Library Journal
  • «Memorable y conmovedora.» Daily Mail


Véase además:


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